Una herramienta práctica para diseñar y visualizar una estrategia de gestión de conocimiento vinculada con retos de negocio clave para la organización y adecuada a sus capacidades y recursos. KM Strategy Planner, una nueva versión que hemos desarrollado aprovechando las últimas experiencias generadas en nuestros proyectos y también los múltiples comentarios y preguntas recibidas a raíz de su publicación. Hemos detallado más los elementos vinculados a la dimensión de negocio, y aportado un poco más de guía para la descripción de los procesos de conocimiento y las métricas de seguimiento. La nueva estructuración de la herramienta nos permite visualizar 3 dimensiones de análisis integradas por 8 bloques de trabajo: Las dimensiones de análisis son: 1. Estrategia: Alinear Retos de negocio, ¿qué se quiere impactar?, con las necesidades de conocimiento vinculados a dicho reto, ¿cuáles son los retos de conocimiento vinculados al reto?, y los dominios de conocimiento asociadas a tales necesidades ¿de que sabemos o debemos saber. 2. Operación: Definir los procesos o iniciativas para atender las necesidades de conocimiento, ¿cómo gestionaremos los dominios de conocimiento identificados?, y describir los elementos organizativos necesarios para su instrumentación (espacios, canales, roles, políticas, acciones de comunicación/reconocimiento, etc.). 3. Seguimiento: Describir las métricas necesarias para realizar seguimiento y valorar el éxito de la estrategia en términos de actividad (acciones realizadas, participación, etc.), conocimiento (capacidades o piezas de conocimiento generadas) y negocio (impacto en KPIS, objetivos, etc.). Y los planos de trabajo: 1. Focos de negocio. ¿Qué queremos impactar? Aquí se establecen los focos de negocio a los que apuntarán las iniciativas de gestión de conocimiento. 2. Retos de conocimiento. ¿Cuáles son los retos de conocimiento relacionados con el reto de negocio? Definir en este caso las principales inquietudes que tiene la organización desde una perspectiva de capacidades y conocimiento. 3. Conocimiento clave: ¿Qué sabemos o qué debemos saber para cubrir las necesidades planteadas? Aquí es importante vincular las temáticas o áreas del saber hacer que influyen o pueden influir en los retos planteados. 4. Procesos de Conocimiento. ¿Cómo gestionar los dominios de conocimiento clave? Podremos formular iniciativas alrededor de cuatro procesos clave: Conectar. Ordenar. Socializa. Desarrollar. 5. Reguladores. ¿Cuáles son las reglas de juego? Establece las directrices de la gestión de conocimiento para mantener la cohesión, regular y moderar el desarrollo de los procesos de conocimiento, todo esto en armonía con el conjunto de valores corporativos. 6. Habilitadores. ¿Qué usaremos? Canales tecnológicos para facilitar los procesos de registro, organización y difusión de contenidos, y entornos presenciales de colaboración para facilitar la transferencia de conocimiento. 7. Dinamizadores. ¿Cómo estimularemos los procesos de conocimiento?Plantea la consideración y/o despliegue de instrumentos de comunicación, sensibilización y reconocimiento, así como también la dedicación de recursos que incorporen la energía necesaria, para estimular a las personas de la organización, en la participación en los procesos de generación, asimilación, intercambio y renovación de conocimiento. 8. Indicadores. ¿Cómo mediremos el impacto de la gestión de conocimiento? Propone indicadores de seguimiento para valorar la salud e impacto de la gestión de conocimiento en tres dimensiones: Indicadores de actividad. Indicadores de conocimiento. Indicadores de negocio. Recorriendo estos 8 planos de trabajo, no sólo se podrá definir y visualizar una estrategia de gestión de conocimiento vinculada a las necesidades del negocio, sino que nos aseguraremos de articular y aprovechar de forma sistémica iniciativas que quizá puedan estar aisladas maximizando así su rendimiento y efectividad.